martes, 12 de julio de 2011

Es un tango no más:




Una vez oí un tango,
era triste y amargo.
Hablaba de un camino,
y de un amor que se ha ido.


Un hombre lloraba,
y el camino regaba.
Era con lágrimas de pena
que el viento se llevaba.


Y él recordaba en ese camino,
todas las tardes que lo recorrió
muy feliz cantando su amor
antes de que éste le dijese adiós.


Cuenta también su decisión,
de ir en busca de la perdida ilusión.
Dice también que el tiempo ha de pasar,
y a los dos ha de matar.


Solo queda el ayer,
para volver a ser aquel
que luz fue alguna vez,
pero que hoy sombra le ha toco ser. 

 Alexiss Mocçia®