domingo, 22 de septiembre de 2013

Poesía Crucigrama:

          
        C a d a  d í a  i n t e n t o ,
        c u l t a r  m i s  s e n t i m i e n t o s .
          o g a n d o  p o r  t u  r e g r e s o,
          n  e s t a  n o c h e,
 v o y y e n d o  v o c e s  d e  r e p r o c h e.
         r a c i a s  a  t u  a d i ó s ,  s o l o  p u e d o ,
         e z a r  p o r  a l g o  d e  c o n s u e l o .
         m a b a  t u s  o j o s  a z u l e s  y  t u  b l a n c a  s o n r i s a ,
m a s a l s a s  f u e r o n  t o d a s  t u s  c a r i c i a s  .
         m á n  e j e r c i e r o n ,  s o b r e  m í ,  t u s  b e s o s .
     y t r a p a n d o  m i  c o r a z ó n  e n  e l  p r i m e r  i n t e n t o .

      D o l o r  a t r o z ,
       n  m i  c o r a z ó n ,
       l o r a n d o  p o r  a m o r .


      C a d a  d í a  i n t e n t o
       c u l t a r  m i s  s e n t i m i e n t o s ,
       i e n d o  c o n  e l  v i e n t o ,
   y  t e s o r a n d o c a d a m o m e n t o .
       Z a p a t e a n d o  e n  l a  l l u v i a
d e l O l v i d o  
     i N t e n t a n d o  v o l  v e r  a  s  e  r   f e l i z .

Alexiss Mocçia®



viernes, 13 de septiembre de 2013

Noches de Arabia:

                     

Afuera el desierto con su arena,
adentro tu cama con sabanas de seda.
Afuera oasis y camellos
adentro tu torso desnudo y sobre él mi largo y almendrado cabello.


Afuera un sol abrazador,
adentro un pasión que llena todo de color.
Afuera caravanas transitando,
adentro tus manos mi cuerpo indagando.


Afuera las horas pasan,
adentro todo se detiene cuando nuestro cuerpos se entrelazan.
Afuera la luna aparece,
adentro la calma nos adormece.


Afuera las estrellas brillan,
adentro el amor nos encandila.
Afuera las criaturas de la noche comienzan a jugar,
adentro tu aroma y el mío a probarnos nos vuelven a invitar.


Y así otra vez,
la esencia de Arabia vuelve nuestra pasión a encender.
Nuestros espíritus se vuelven a seducir,
nuestros cuerpos a fundir,
y  nuestras almas a sentir,
todo al ritmo de la pasión que esta noche de Arabia intenta transmitir.

Alexiss Mocçia®

jueves, 29 de agosto de 2013

La Piedra Ancestral


Hace tiempo en un campamento scout, mientras caminaba por la orilla de la laguna Llum, algo que resplandecía a la luz del sol, llamó poderosamente mi atención.
Me acerque y tomé esa hermosa y asimétrica piedra en mis manos. Entonces recordé lo que una vez mi primo Sebastian, que estudia arqueología,  me contó sobre una piedra misteriosa que perteneció al Faraón Ramses ll y que él usaba como talismán, para que lo protegiera de los espíritus malignos.
Cuenta la historia que dicha piedra, había sido obsequiada a Ramses ll al casarse con la hija del rey hitita Hattusil III, cuando éste la entrego al faraón como prenda de un tratado de paz y fraternidad eterna en 1264  a. C.. La piedra que pertenecía a la corona de Menes, personaje legendario egipcio que unió el Alto Egipto con el Bajo Egipto y que ciñó sobre su cabeza, tenía los colores blanco y rojo resumiendo las insignias del Alto y Bajo Egipto.
Se cree que una esclava, celosa de la esposa del Faraón le robó la piedra y huyó hacía el río Nilo. Mientras intentaba cruzarlo, el caudal del río creció y ella pereció. La piedra que llevaba consigo fue arrastrada por la corriente hacia el mar Mediterráneo, llegando a las costas de Europa.
Pasaron más de mil años hasta que alguien volvió a contactarse con ésta; sería por esto, y por la erosión del mar, que la piedra se achicó.
Se piensa que un pescador siciliano se la vendió por pocas monedas a un navegante catalán, éste la llevó consigo en sus viajes expediciones a América  según cuenta un juglar. Puede ser que haya sido parte del motín de algún pirata. Ya que un cuento popular dice de un hombre que una noche encontró una bolsita pesada en su casa junto al río, se puso a jugar con las piedras que había adentro de ésta, (porque le gustaba escuchar el sonido que hacían al caer en el agua), mientras amanecía.


Cuando el salió, se dio cuenta de que brillaban y se percató de que pudieron ser parte de un tesoro y se lamentó de haber tirado tantas. Yo creo que una de esas tantas piedra llegó a la laguna Llum y que podría ser la tengo en mis manos. Pues sus colores se asemejan a aquella extraña piedra; y su luminosidad me hace sentir la energía de aquella civilización y la mágica influencia del dios Amón-Ra. 

Fin
Alexiss Mocçia®

viernes, 16 de agosto de 2013

En la lejanía de la noche… se oye una voz:



En la lejanía se oye una voz
es el lamento de un alma llena de dolor;
que trae consigo un cruel adiós
y recuerdos de un viejo y traicionero amor.



Él lo dio todo por ella,
inclusive la luna y las estrellas.
Mató a un ruiseñor por una rosa,
y aún así todo fue poca cosa.



Dedico toda su vida a serle fiel,
y no pudo siquiera rozar su piel.
Le escribió sinceros versos,
que no sirvieron ni para conseguir sus besos.



Recibió por su cariño solo humillación y despecho,
y aún así siempre a las balas le puso el pecho.
Podía haber tejido un abrigo con sus sueños,
pero, al estar tan enamorado, prefirió que el viento de ellos fuese el dueño.



Nunca busco, para su dolor, consuelo;
pues jamás dejo de hacerse el duro.
Nunca mostró cuán difícil era su duelo;
ya que sentía que nada era imposible si el amor era sincero y puro.



Todo se trago,
y de nada se quejo.
Todo lo dio,
y de nada se arrepintió.



Pero hoy su fin le llegó,
la sombra de la noche eterna vino en su busca.
Es el momento de olvidarse lo que ya pasó,
y soltar toda aquella carga que bien no luzca.



Por eso es que se escucha hoy, en la noche, una voz.
Es un alma expiando su dolor.
Es una vida que dice para siempre adiós.
Es alguien que a pesar de todo siempre creyó en el amor.

Alexiss Mocçia®

sábado, 3 de agosto de 2013

Egipto:


El sol nace por detrás de las pirámides,
pues a despertar al Faraón, sus rayos vienen.
El Faraón, al igual que el sol, es de todo Egipto
el supremo dueño indiscutido.


Al igual que las pirámides,
la vida de los faraones
está llena de magia, misterio,
brillo y ensueño.  


 A ambos los envuelve la inmortalidad
y los embarga la obligación,
de dar al pueblo estabilidad y prosperidad,
para que no reine la desolación.


Nadie se pregunta qué pasa,
por el corazón humano del Faraón.
Solo se espera y se desea,
que, en él, el bienestar de Egipto sea la prioridad mayor.


No ven a un hombre, ven a un Dios.
Le rezan, le hacen ofrendas y le obedecen sin rezongar.
Inclusive lo siguen venerando, cuando este mundo ha dejado de habitar.
Y es que sin su luz deviene el caos.


¡Egipto amado!, no apagues tu luz,
ni sucumbas aún.
¡Egipto soñado!, conserva tu brillo por mil años más,
que todavía hay niños que sueñan con tu suelo pisar.


Me dolería verte perecer.
No me gustaría verter desaparecer.
Quisiera, como la gente, que en ti, vivió ayer
verte siempre triunfal y perenne.


Espero Egipto amado,
que siempre haya un Faraón que vele tu hado,
o que tus monumentos
te protejan de la destrucción que ejerce, el paso del tiempo. 


Alexiss Mocçia®

lunes, 29 de julio de 2013

El vals del amor:


Toma mi mano, sostén mi cintura.
Y girando una vez más
dejemos, que en esta noche, reine la locura,
mientras me besas al son de este hermoso vals.


No permitas que la noche se termine,
convence a la luna para que no deje salir al sol.
No dejes que me vaya sin que te bese,
y concédeme el placer de escuchar un «te amo» con tu dulce voz.


No es una música cualquiera,
la que en esta noche suena.
Es suave melodía que del corazón hoy brota,
para que olvidemos aquella historia, con sabor a derrota.


Bésame, mientras los músicos de la orquesta nuestro vals mágico toquen,
y la luces de las candelas nos iluminen.
Que esta noche quede en nuestra memoria grabada
y escriba una historia soñada.


Y antes de que el sol haga su aparición,
téjeme, con caricias, una ilusión. 
Dame un beso que sepa a glorioso sueño,
y deja que el amor ,de este maravilloso encuentro, sea el dueño.

Alexiss Mocçia®

jueves, 6 de junio de 2013

De noche… te sueño, te beso y te amo:



Suspiros de la noche,
que saben a puro reproche.
Me señalan con cizaña,
Que sin ti no soy nada.


Si bien ha pasado bastante tiempo de nuestro adiós,
hoy, más que nunca tu recuerdo se vuelve atroz.
Me duelen nuestras últimas palabras,
y por eso voy perdiendo la calma.


Se presentan sueños
que parecen pesadillas,
que me traen el recuerdo, de tu último beso
sobre mi mejilla.


Todo esto pasa cuando manda mi subconsciente,
y ya no hay lugar para mi mente inteligente.
Se desvelan los sentimientos que de día duermen,
y se desatan las pasiones que el sol adormece.


No hay en la noche consuelo,
para tanto revuelo.
Y no queda más remedio,
que admitir que aún te quiero.


Te quiero,
porque aún te presiento.
Y te intuyo,
pues aún te deseo.


Y es así como evitar no puedo,
que de noche,
yo te sueñe, te bese
y te ame de nuevo.

Alexiss Mocçia®